Día 13 - Mateo 6:9-13

9 Por esta manera, orad: Padre nuestro, que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.

10 Venga tu reino. Tu voluntad se hará en la tierra, como en el cielo.

11 Danos hoy nuestro pan de cada día.

12 Y perdónanos nuestras deudas, como nosotros perdonamos a nuestros deudores.

13 Y no nos dejes caer en tentación, más líbranos del mal: Porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, para siempre. Amén.

Mateo 6:9-13

Una gran manera de comenzar cada día es centrándose en quién es Dios! Hoy concéntrese en la bondad, la grandeza y la gloria de Dios. Centrarnos diariamente en estos tres atributos de Dios nos da una imagen completa o un filtro de gracia. El Padre Nuestro es una gran oración para ayudarnos a pensar en la bondad, la grandeza y la gloria de Dios. 

Cuando llamamos a Dios nuestro Padre, nos recuerda que somos Sus hijos. Ama, cuida y provee a para sus hijos. Es un gran padre. Pero eso no es suficiente, ¿verdad? Pueden saber que son amados y que Dios es bueno, pero todavía pueden estar pasando por momentos difíciles. Así que no sólo necesitamos centrarnos en la bondad de Dios, sino que también necesitamos poner nuestra mente en lo grande que es Dios. Nuestro gran Dios está en el cielo. Cuando pensamos en nuestro Dios en el cielo, nos recuerda que él reina y gobierna y está en control. Tiene todo el poder que necesitamos para superar tiempos difíciles. Por último, tenemos que dar gloria a Dios. Cuando "santificas" el nombre de Dios (o lo haces santo), es un recordatorio útil de que la vida no se trata de nosotros.

 Cuando te levantas por la mañana, tu prioridad número uno debe ser tener la mentalidad correcta para tu día. Lo primero es lo primero: ¡simplemente concéntrate en quién es Dios! Concéntrate en Su bondad, grandeza, gloria y pídele que te ayude a ver todo lo demás a través de ese filtro. Recuerda, no se trata de lo que haces., sino de quién es Dios. 

Extractos tomados de Despertar: Un nuevo enfoque de fe, ayuno y libertad espiritual por Stovall Weems (pp. 33-34)